La estación de montaña de Manzaneda amaneció ayer cubierta por una fina capa de nieve. No fue suficiente para que el complejo hostelero pudiese abrir las pistas y los remontes, aunque sí bastó para que un nutrido número de familias gallegas acudiese a disfrutar de la nevada. Cuando el espesor de la nieve no permite la práctica del esquí, los pequeños se convierten en protagonistas y se divierten arrojando bolas heladas y construyendo figuras.
La nevada intermitente sólo dio para formar una capa de apenas un par de centímetros, la cual, según las previsiones, se irá retirando paulatinamente. Los partes que anuncian lluvia para el miércoles tampoco hacen presagiar una semana favorable.
La nieve de ayer bastó a las familias gallegas que acudieron al complejo de montaña. Entre ellas había grupos llegados desde Nigrán, Vigo o A Coruña, entre otros. Las provincias de Ourense y Pontevedra son las que más visitantes aportan, según dijo la dirección. Durante la jornada también pudo verse algunos jóvenes, como los de nacionalidades brasileña y colombiana que se divirtieron paseando por el nevado recinto.
Fuente: LaRegion
El pasado sábado no nevó. A pesar de ello, un centenar de niños y adultos pontevedreses se desplazó a Manzaneda para realizar las actividades que ofrece la estación de montaña. La ampliación de esta oferta de alternativas a la nieve es el objetivo de todos los organismos implicados en su relanzamiento.
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